¿Sabías que los recién nacidos suelen dormir alrededor de 16 horas al día? Tanto tú como tu bebé, estarán juntos y despiertos cada 3 o 4 horas para que lo alimentes y disfrutes de tenerlo cerca de ti.
Pero en esos momentos que duerma, aunque quieras estar al pendiente de él todo el tiempo, la realidad es que tendrás que hacer otras cosas. Ya sea lavar biberones, cuidar a tus otros pequeños en caso de que los tengas o simplemente, descansar.
Por eso, queremos darte cinco consejos para que tu bebé tenga siestas seguras y tú puedas estar tranquila.
Siempre coloca al bebé boca arriba para dormir
Hasta que tu pequeño cumpla un año, colócalo boca arriba cuando lo acuestes para la siesta o la hora de dormir. Si tu bebé se voltea boca abajo por sí solo, gíralo suavemente boca arriba nuevamente. Una vez que pueda voltearse en ambas direcciones (generalmente alrededor de los seis meses), puedes dejarlo dormir como se sienta más cómodo.
Mantén la cuna o el moisés libre de cualquier artículo blando que no sea el colchón
Aunque su cuna se vea linda llena de mantas, almohadas y peluches, son objetos que pueden ser peligrosos ya que representan un riesgo de asfixia cuando tu bebé aún es muy pequeño. Tu bebé y el colchón deben ser lo único que haya en su cuna o colecho.
Evita acostar al bebé contigo en la cama
En su lugar, mantén al bebé cerca durante sus primeros seis meses colocando su cuna en la habitación contigo. De esta manera, estarás allí en caso de cualquier emergencia nocturna y ellos podrán dormir de manera segura y tranquila en su propio espacio. Las cunas-colecho son la mejor opción, ya que cuentan con múltiples posiciones de altura para que puedas ajustarlo a tu cama de forma segura.
Viste a tu bebé para dormir
Cuando vistas a tu bebé para dormir, quítale cualquier cordón, borla u otro elemento en la ropa que pueda ser peligroso. También es importante que la ropita sea apropiada para el clima, es decir, que no pueda tener ni frío ni calor.
Haz que la habitación sea óptima para dormir
Los bebés duermen mejor cuando la habitación en la que están tiene la temperatura, la humedad y la luz adecuadas. Mantén una temperatura moderada (entre 20° y 22°C). Un humidificador es un accesorio básico para la habitación, ya que te ayudará a mantener el clima ideal.
Tomar precauciones y tener los cuidados precisos para mantenerlos seguros mientras duermen, es especialmente importante durante su primer año. Esperamos que nuestros consejos les ayuden a descansar plácidamente… al menos hasta la siguiente toma de biberón.
